En el mundo vinícola es muy importante la presentación del vino y su botella: etiqueta, corcho, forma y tamaño son cruciales tanto para la comercialización del vino como para su conservación y crianza dentro de la misma. En esta ocasión desde En Copa De Balón nos centraremos en el tamaño y la forma de las botellas de vino, parte esencial del envasado y conservación de los vinos y que no se empezó a utilizar hasta el siglo XVII.
El Tamaño Importa
El tamaño de las botellas juega un papel importantísimo en el envejecimiento y conservación del vino ya que a medida que aumenta el tamaño también aumenta el tiempo que tarda en evolucionar el vino. Además como ya vimos en nuestro post de ¿el vino abierto se pone malo? el contacto del vino con el oxígeno es perjudicial para el mismo, por lo tanto, cuanto más grande es la botella más vino contiene y el cuello de la misma no varía mucho en tamaño. Esto quiere decir que el porcentaje de oxígeno con respecto al vino es menor cuanto mayor sea la botella, por ello son preferibles para su guarda y conservación las botellas de mayor tamaño. A continuación os mostramos cuáles son los tamaños de botella más conocidos y utilizados en el mundo del vino:
1. Botella Benjamín o Piccolo: Botella de 200 ml. se utiliza normalmente para cavas y champagnes.
2. Tres Octavos o Media Botella: Botella de 375 ml.
3. Tres Cuartos o Botella Estándar: Botella de 75 ml. La más común y utilizada.
4. Botella Magnum: Botella de 1,5 Litros.
5. Doble Magnum o Jeroboam: Botella de 3 litros. El nombre de Jeroboam se utiliza para nombrar los cavas y champagnes.
6. Rehoboam: Botella de 4,5 litros. Se utiliza tanto para vinos como para cavas y champagnes. Además también se emplea para algunos destilados como Whisky Johnnie Walker Black Label.
7. Imperial o Mathusalem: Botella de 6 litros. El nombre de Mathusalem se utiliza para nombrar los cavas y champagnes que oscila entre los 6 y 6,5 litros.
8. Salmanasar: Botellas entre 9 y 9,5 litros.
9. Baltasar: Botellas de entre 12 y 12,5 litros.
10. Nabucodonosor: Botellas de 16 litros.
11. Salomón o Melchior: Botellas de 18 litros usadas únicamente para cavas y champagnes.
12. Souverain: Botellas de 25 litros usadas únicamente para cavas y champagnes.
13. Primat: Botella de 27 litros usadas únicamente para cavas y champagnes.
14. Melchizedek o Midas: Botella de 30 litros, usadas únicamente para cavas y champagnes.
Tipos de botellas según su forma
Las formas que podemos encontrar en las botellas de vino llevan el nombre de la región donde nacieron y donde se comenzaron a usar. Por lo que la referencia que debemos tomar para estas botellas es su origen, en base a esto, podemos diferenciar las siguientes formas de botellas de vino:
Borgoña: Es el tipo de botella más antiguo conocido, recibe su nombre de la región francesa donde fue creada, Borgoña. Se caracteriza principalmente por presentar hombros en pendiente lo que le confiere un toque más estilizado.
Bordelesa: Es la botella más conocida y la que más se utiliza en la actualidad. Su forma cilíndrica está especialmente diseñada para el almacenamiento de los vinos en posición horizontal. El color suele variar según el tipo de vino, en el caso de vinos blancos se utiliza un color verde claro y para vinos dulces un color más transparente. Su nombre procede de la región de Burdeos, donde fue creado.
Rhin: Destaca por su altura y hombros en caída, es originaria de Alemania de la zona del río Rhin. Suelen utilizarse para vinos blancos.
Cava y Champagnes: Son botellas de hombros bajos y vidrio muy grueso, poseen un pequeño hueco en su parte inferior para resistir mejor la presión característica de los vinos espumosos. La mayoría de vinos espumosos se embotellan en este tipo de botellas.
Jerezana: Son botellas similares a las bordelesas pero de origen español, concretamente de Jerez de la Frontera, en Cádiz. Tiene cuello abombado y se utiliza para los vinos finos de Jerez, manzanillas y algunos licores portugueses.
Franconia: Es el tipo de botella más desconocido y que más se diferencia del resto, ya que tiene forma aplanada y no cilíndrica. Tiene su origen en Alemania.