Herencia Altés, los vinos que transportan a la Terra Alta

Herencia Altés, los vinos que transportan a la Terra Alta

Núria Altés y Rafa de Haan iniciaron en 2010 el proyecto que hoy en día conocemos como Herència Altés, con el cultivo de las fincas familiares.

Cuentan con 50 hectáreas de viñedo situadas en la comarca de la Terra Alta entre los municipios de Batea y Gandesa, a unos 420-500 m sobre el nivel del mar y de las cuales unas 20 hectáreas son viñas viejas , plantadas entre principios y mediados del siglo XX.

Priorizan la preservación de los viñedos viejos y la orografía natural, respetando los márgenes de piedra seca, que son reservas de biodiversidad e insignias de su cultura y paisaje. A su vez, estos márgenes les permiten aprovechar las pendientes naturales del territorio y diferenciar los terruños particulares que caracterizan cada una de las pequeñas parcelas.

Apuestan por las variedades autóctonas a la hora de elaborar vinos frescos y elegantes, enfatizando con las Garnachas y resaltando la Garnacha Blanca, bandera e insignia de la comarca.

Trabajan todas sus fincas de forma manual y ecológica, siempre con el máximo respeto por el entorno y por el patrimonio natural y cultural. En 2015 empezaron la transición hacia la agricultura ecológica y, a día de hoy, todos sus viñedos tienen la certificación ecológica. Además, practican la agroecología, utilizando técnicas alternativas para mantener los viñedos sanos y ayudar a generar vida en los suelos y en el territorio.

En la bodega tienen una filosofía de mínima intervención, es decir, intentan influir lo menos posible en el transcurso de la elaboración del vino, siempre buscando la máxima frescura y elegancia que caracterizan sus vinos.

Fermentan a través de microvinificaciones, en pequeños depósitos que les permiten separar las uvas de diferentes parcelas para mantener el fruto de cada tipología de suelo. Además, los mostos inician la fermentación de forma natural y espontánea con levaduras autóctonas provenientes del viñedo.

En los casos en que utilizan madera, prefieren barricas grandes (500 y 600 l) o fudres de gran capacidad (2.500 o 5.000 l) con la filosofía de hacer crianzas largas pero con un impacto mínimo del roble. Todo esto les permite elaborar vinos frescos, serenos, con carácter y muy elegantes.

VINOS DE PARCELA

Benufet 2023: Acariciada por los vientos de Cerç y Garbí, se trata de un Garnacha blanca en estado puro.

La Borrasona 2022: Una Garnacha fresca y muy golosa para disfrutar todo el año.

VINOS SINGULARES

La Tarentina 2023: Una Garnacha Peluda sutilmente tímida que se asilvestra al agitarla, dando paso a un rosado muy fresco y gastronómico

La Pilosa 2022: Un vino refinado y elegante que parece tímido al principio, pero contiene notas salvajes.

VINOS DE FINCA

La Serra Blanc 2021: Un 100% Garnacha Blanca de la finca más simbólica (Primera finca calificada de garnacha blanca de Cataluña) reflejo del terruño y emblema de la casa.

La Xalamera 2020: Vino de finca que resulta de los viñedos viejos de La Xalamera y del esfuerzo por mantener el patrimonio agrícola.

"Cuando pruebas nuestros vinos, te transportan a un sitio, la Terra Alta; un carácter, nuestro terroir; y una forma de hacer, Herencia Altés".