i Eres un amante del vino, y, aunque dispongas de un espacio limitado, puedes organizar una bodega particular en casa, que es la mejor manera de conservar las botellas de vino y, de paso, impresionar a las visitas.
No hace falta una casa muy grande. Está claro que si se dispone de una habitación en la que almacenar solamente los vinos, se puede adecuar este espacio a las condiciones que necesitan las botellas. Pero, si no, siempre podemos reservar un hueco en alguna otra habitación para ellos, ya sea en estanterías, muebles para bodegas o en un botellero refrigerado para este fin.
¿Qué condiciones se necesitan para conservar las botellas de vino?
El vino necesita unas condiciones muy específicas para conservar todas sus propiedades. Vamos a resumirlas:
- Una temperatura constante de entre 10 y 16 grados centígrados. Es importante que el espacio donde se almacenen los vinos no sufra cambios bruscos de temperatura, ya que es uno de los factores que más perjudica sus propiedades.
- Ausencia completa de la luz del sol, no pueden recibir la luz directa de ningún modo.
- Nada de olores, por lo que no es conveniente guardarlos con otros alimentos que no estén convenientemente envasados.
- Tampoco es bueno que las botellas reciban corrientes de aire, por lo que mejor un lugar estanco.
- Asimismo, no deben padecer vibraciones, como las que se producen, por ejemplo, en muchos frigoríficos
- Las botellas deben almacenarse tumbadas, ya que, de este modo, el vino está en permanente contacto con el corcho y éste no se resaca, con lo que hay menos posibilidades de que se resquebraje al abrir la botella
Espacios para guardar el vino
Hay espacios de las casas que son más propicios que otros para guardar el vino:
- Una despensa puede ser un lugar ideal siempre que, como hemos señalado, esté libre de olores y corrientes y tenga espacio para colocar estanterías o muebles diseñados para bodegas.
- El garaje también es una buena elección, siempre que se aísle convenientemente el lugar específico, para evitar las vibraciones y los olores.
- Un sótano es perfecto, ya que es fresco y seco, aunque hemos de cerciorarnos de que no hay corrientes de aire.
- Un altillo o maletero también es buena opción, siempre que no sufra cambios de temperatura demasiado acusados (si no está bien aislado, en los meses cálidos, la temperatura puede subir demasiado).
Consejos para tu bodega casera
Y, como expertos en vino, vamos a proponerte unos consejos para optimizar tu bodega particular casera:
- No te empeñes en guardar durante años el vino joven: si compras este tipo de caldos no te demores demasiados meses en consumirlos, ya que pasado este tiempo tienden a estropearse. El vino blanco y el rosado pueden aguantar un año, pero no mucho más. Así que, ¡atento a las fechas!
- Guarda vinos Crianza, Reserva y Gran Reserva, que están pensados para mejorar con el paso del tiempo.
- Si vas a usar botelleros, es preferible que sean de madera en lugar de metálicos o de plástico.
- Es recomendable tener una variedad de vinos bastante amplia: unos poco tintos (tanto jóvenes y crianzas), blancos, rosados, vinos dulces…
- Te proponemos tener alguna botella de vino del formato magnum, que es perfecto para comidas o cenas familiares o con amigos improvisadas, ¡las mejores!
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